Los avatares virtuales, o “chatbots”, son programas interactivos alimentados por inteligencia artificial que simulan las conversaciones humanas.
Facebook quiere que los usuarios de su aplicación de mensajería Messenger “chateen” con robots empresariales con la naturalidad que lo harían con sus amigos, un proyecto que genera entusiasmo y críticas. Parece que ninguna compañía quiere quedarse atrás y es que, el potencial que tienen para las marcas estos sistemas en cuanto a engagement con el consumidor, hacen que sean el objeto de deseo para la mayoría de las compañías.
“No conozco a nadie a quien le guste hablar por teléfono con una empresa y tampoco instalar una aplicación cada vez que tiene que usar algo. Por eso hemos convertido Messenger en una aplicación para que los negocios se comuniquen con los usuarios”, dijo Zuckerberg, por lo que no se trata tanto de que las marcas deseen hablar con los consumidores sino de que los consumidores deseen contactar con ellas.
En tan solo unos años, los bots serán parte de nuestras vidas. Encargar comida, flores o cualquier otro tipo de servicio será posible gracias a estas nuevas, inteligentes e interactivas interfaces de usuario.
Más allá de los “chatbots”, Facebook dio a conocer esta semana su plan para la próxima década en la que además de las nuevas formas de interactuar en Messenger apostará por el vídeo en directo, la realidad virtual y aumentada, la inteligencia artificial y un mundo más conectado.
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